Australia podría autoabastecerse con energía verde en sólo diez años


Es una pena que Australia esté contaminando lo suyo cuando, según los expertos, el país tiene un tremendo potencial para generar energía renovable. En concreto, un informe de la Universidad de Melbourne afirma que el país podría autoabastecerse con energía solar y eólica en tan sólo una década.

Sería necesario un impulso tremendo para lograrlo, lo que equivaldría a la toma de decididas medidas políticas que, evidentemente, hoy por hoy, ni por asomo están tomándose.

Por contra, Australia tiene el dudoso honor de ser el país con la más alta emisión del mundo de gases de efecto invernadero por habitante, con 28.000 millones de toneladas de dióxido de carbono al año.

Eólica y solar térmica

Las posibilidades son muchas, sin embargo. De acuerdo con el informe, el país podría explotar con gran éxito sus recursos naturales, propicios para producir energías limpias diversas en grandes cantidades.

Hasta tal punto se confía en sus posibilidades, que el informe se atreve a afirmar que toda la energía que se precise podría proceder de fuentes renovables, sin dudarlo. En concreto, se cree que la eólica satisfaría el 40 por ciento de la misma, mientras la solar sería muy productiva en las zonas interiores.


En concreto, el mencionado trabajo alude a la energía solar térmica como solución para rendir lo necesario como para cumplir con las previsiones realizadas por éste, y así alcanzar el ambicioso objetivo del autoabastecimiento:

Torres enormes que contengan agua salada climatizada con luz dirigida sobre ellas para calentarla y así impulsar las turbinas, que serían capaces de generar el 60 por ciento de las necesidades energéticas de Australia.

A grandes rasgos, la idea sería crear una red nacional que combinara todas estas energías para crear un sistema de energía renovable al ciento por ciento. Eso sí, el coste de la transformación no sería pequeño, con una cantidad estimada de 370 millones de dólares australianos (unos 292 millones de euros) durante diez años, es decir, el equivalente al 3 por ciento del PIB. Además, los consumidores también deberán apoquinar una media de 8 dólares australianos por semana.

A cambio, se crearía empleo verde y se desmantelaría la industria del carbón y del gas, abandonándose de forma progresiva su dependencia, por lo que también se perderían empleos en estos dos sectores, pero el balance laboral sería positivo.

2 comentarios

  1. desde que se descubrieron nuevos modelos baratos para producir energia verde se pone mas y mas en evidencia el grado de servidumbre hacia los paises petroliferos por parte de los paises poderosos,frenando el progreso de la misma forma como lo hizo la inquizicion en la edead media .

  2. Hola Sorin,
    Es cierto, los intereses creados ejercen son una barrera importante, pero poco a poco va avanzándose. Un saludo y gracias por comentar.

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