Con el nuevo edificio ecoamigable que disfruta la policía montada de Medellín, se espera una mejora de la zona como enclave natural para uso y disfrute de la ciudadanía, un mayor bienestar de los animales, así como un uso eficiente de los recursos naturales autóctonos para su mantenimiento.
Su ubicación en un espacio natural de esta ciudad colombiana, conocido como Parque Arvi, permite llevar a cabo una conservación y mantenimiento utilizando los recursos naturales, siempre con un impacto mínimo en el entorno y buscando el ahorro. También se busca crear sensaciones positivas en sus moradores, ya sean animales o personas, según sus creadores, la empresa EDU Medellín.
En concreto, en este edificio se adiestran 50 caballos y 10 perros, y en el edifico se han incluido sistemas de energía limpia, bioclimáticos, así como un ecológico tratamiento de desechos. Asímismo, el material de construcción utiliza numerosos elementos reciclados.
Energías limpias
La construcción utiliza la energía solar de distintos modos, desde la energía fotovoltáica que abastece de agua caliente, hasta la iluminación natural, un componente que es igualmente bioclimático, como la ventilación natural. Con ellos se logra un ahorro energético gracias a la implementación estatégica de estos aspectos, entre otros muchos.
Se dispone, por otro lado, de un tanque para almacenar agua de lluvia, cuya recolección se usa en riego de exteriores y limpieza de interiores, incluyendo tanto los establos como el resto de las dependencias. Y, con respecto a éstos, se utiliza un biodigestor o digestor de residuos orgánicos para convertir el estiércol en biogás, con el resultado de cubrir las necesidades energéticas de la cocina.
Con su estética integrada en el entorno y su respeto por el mismo el proyecto también busca propiciar la imagen de cercanía entre la ciudadanía y las fuerzas de seguridad, en este caso de la Policía Nacional.
