Europa tiene que ahorrar energía. Por responsabilidad ante el resto de países del mundo. Una responsabilidad ineludible. Así lo cree la organización Amigos de la Tierra Europa, que ha lanzado una campaña al respecto, pidiendo a los jefes de estado europeos que se encuentran en Bruselas celebrando la Cumbre sobre Energía que adopten un objetivo legalmente vinculante para reducir el consumo energético. Una norma que les obligue. Se trata de no depender de las políticas internas, de elaborar una legislación para toda Europa.
Es el único modo que permitiría alcanzar el objetivo de aumentar un 20% la eficiencia energética para 2020, lo que, además, supondría dejar de emitir unas 800 megatoneladas de dióxido de carbono, disminuir la dependencia energética y evitar la construcción de 1.000 centrales de carbón.
Este objetivo vinculante podría contribuir a ahorrar unos mil euros por vivienda y crearía hasta un millón de empleos verdes en Europa, afirma Brook Riley, responsable de la campaña de Eficiencia Energética de Amigos de la Tierra Europa.
El propio Consejo Europeo ha reconocido que Europa no está en el buen camino para conseguir los objetivos propuestos. Amigos de la Tierra considera que la Unión Europea debería reducir su dependencia energética en vez de construir nuevas tuberías para gas y petróleo. El mejor método para disminuir el consumo de energía en Europa es reducir el consumo. La mejor energía es aquella que no se utiliza.
Al objetivo legalmente vinculante habría que añadir políticas sociales más ambiciosas en cada uno de los Estados miembro. Para ello, Amigos de la Tierra llevará a cabo una campaña en diez países europeos que tratará de concienciar sobre temas como la eficiencia energética en edificios, ya que el sector supone el 40% del uso energético y el 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa.
Aunque no se puede olvidar que todos los ciudadanos tienen su parte de responsabilidad en este asunto. Si no necesitas esa luz, apágala.