Los barcos petroleros están empezando a ser más sostenibles al evitar la dependencia de combustibles fósiles, al menos, en un buen porcentaje, con el fin de minimizar las emisiones a la atmósfera. Y entre los avances introducidos para alcanzar este objetivo está la incorporación de velas para ser empleadas como método de impulsión. Algunas experiencias se han llevado ya a cabo con éxito. ¿Cuáles? Aquí te contamos varias de ellas.
Los petroleros de vela
Dentro de las novedades está el buque petrolero Pyxis Ocean. Esta embarcación, de Cargill, fue capaz de hacer un viaje entre China y Brasil con velas gigantes, que se instalaron en la amplia cubierta del buque. Una medida con las que se ha logrado reducir la emisión de gases a la atmósfera.
Estas velas tienen la particularidad de estar construidas con paneles del mismo material que los aerogeneradores eólicos, aparte de ser orientables. Su funcionamiento consiste en plegarlas cuando el barco está en el puerto para abrirlas una vez navegando en mar abierto para aprovechar la fuerza del viento.
Con este sistema no se ha logrado reducir al 100% la dependencia de combustibles fósiles. Se ha alzando el 30%. Este dato no solo tiene impacto positivo por las emisiones a la atmósfera, sino también permite el ahorro económico al tener que comprar menos combustible. En concreto, se ahorra una tonelada y media de combustible por día. Es más, con cuatro velas en un barco, se ahorran seis toneladas diarias. La reducción de CO2 se cifra en 20 toneladas.
Otro buque es el petrolero chino New Aden, con velas rígidas con las que navega a velocidad de crucero. El consumo, en este caso, se reduce en el 9,8%. Se evita emitir a la atmósfera más de 2.900 toneladas de CO2.
En esta lista también se engloba el conocido como La Naumon, con vela rígida, aunque en este caso el uso es más bien lúdico puesto que es el nombre del barco de la compañía teatral La Fuera dels Baus en el que ofrece espectáculos itinerantes.