La energía eólica aporta un 21,7 por ciento del total de la electricidad en España, lo que la convierte en la principal fuente de electricidad en el mes de noviembre. Con estas cifras supera otras tecnologías, como la nuclear, según la Asociación Empresarial Eólica (AEE), a partir de datos oficiales de la Red Eléctrica de España (REE).
En concreto, la eólica produjo un total de 4.594 gigavatios hora (GWh) durante este periodo, sobrepasando los 4.223 GWh de la nuclear y aventajando todavía más al carbón, con 4.191 GWh. Además, dentro del régimen especial de renovables y cogeneración, la energía eólica alcanzó el 52, 43 por ciento de la producción de este sector, si bien únicamente recibió primas equivalentes al 21,2 por ciento, según los últimos datos de la Comisión Nacional de la Energía, correspondientes al pasado mes de septiembre.
Para que nos hagamos una idea de la importante producción generada por la eólica, su aportación bastaría para cubrir las necesidades eléctricas de un país más pequeño que el nuestro como, por ejemplo, Portugal.
Quejas del sector eólico
Todos estas buenas nuevas han servido de argumentación al sector para, a través de la AEE, manifestar su desacuerdo con la nueva política fiscal, que consideran penalizadora e impedimento para el avance de la energía eólica en España. Así, si por un lado se demuestra que la eólica tiene un peso importante en la realidad energética española, y se justifican sobradamente las primas recibidas, a juicio de la AEE también hay que tener en cuenta que es»injusto e inaceptable» que la nueva fiscalidad eléctrica, pese a mostrar «vocación de sostenibilidad ambiental, penalice por encima de todas las demás tecnologías a la eólica, que ha demostrado sus claros beneficios medioambientales y económicos para España».
En suma, se reclama otra política verde en general y, en particular, que el Gobierno recule en su intención de incrementar del 6 por ciento al 7 por ciento el nuevo impuesto de producción eléctrica.