Máster de Energía Eólica en español


Este enero de 2012 comenzará a impartirse en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), en España, el Máster en Energía Eólica. Se trata del primer máster cien por cien eólico de España y Latinoamérica y uno de los primeros de Europa, según ha señalado la Asociación Empresarial Eólica (AEA), que ha firmado un convenio con la mencionada universidad por el que participará en el proyecto de diversas maneras, entre otras, impartir algunos contenidos.

Sin duda, este Máster es una necesidad para las empresas del sector eólico de contar con profesionales preparados específicamente en el desarrollo de nuevas técnicas de energía eólica, así como de sus instalación y mantenimiento. El programa está dirigido a titulados universitarios que deseen adquirir o completar una formación técnica especializada en el campo de la energía eólica.

Los contenidos se centrarán en todos los aspectos, tanto teóricos como prácticos, que demandan las empresas del sector. El Máster supone 60 créditos y pretende equipararse a sus equivalentes en países del entorno europeo, como Alemania o Dinamarca. En ese sentido, Alberto Ceña, director técnico de la Asociación Empresarial Eólica (AEA), señala que nace con el objetivo de convertirse en un referente de la educación superior eólica de postgrado en todo el mundo y de acompañar el desarrollo de este tipo de energía limpia y renovable en los países hispanohablantes.

Este primer curso acabará el 31 de octubre de 2012. La distribución del grado de dedicación a lo largo del curso puede ser flexible y adaptada a la situación de cada alumno, al comienzo del curso se establecerá un calendario que sirva de orientación general sobre el ritmo que puede seguir el alumno, en función de los módulos en los que se haya matriculado. El equipo docente está formado por profesores de distintas especialidades de las escuelas de ingenieros industriales de la UNED y de la Universidad Politécnica de Madrid, así como por expertos de la Asociación Empresarial Eólica.

Una prueba más de que a la energía eólica le queda mucho camino por recorrer.

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