La energía hidroeléctrica abastece a Etiopía en la actualidad como principal, casi exclusiva, fuente de energía, que produce casi un 90 por ciento de la electricidad del país. Pero esto podría cambiar con el tiempo, quizás no tanto como pudiera parecer, si sigue explotándose su gran potencial geotérmico.
La razón de peso por la que se está invirtiendo en esta fuente de energía renovable son las prolongadas sequías que ha traído el cambio climático, una gran amenaza para la continuidad de la energía hidroeléctrica. Un motivo negativo que, a la postre podría resultar beneficioso en cuanto motor de nuevas energías verdes para lograr una diversificación.
Así, el objetivo de la Corporación de Energía Eléctrica de Etiopía ha decidido apostar por la geotermia para que el suministro no se vea comprometido en el futuro.
Multiplicarla por cuatro
El plan de diversificación de inició en el 2010 y su ambiciosa meta es cuadruplicar, como mínimo, la actual generación de geotermia de 2.174 MW,
Recordemos que el Banco Mundial concedió a Etiopía 40 millones de dólares para impulsar el desarrollo de varios proyectos de energía renovable a través del sector privado interno.
Según las últimas previsiones, durante los próximos cinco meses, el Banco de Desarrollo de Etiopía invertirá la importante cantidad de 20 millones de dólares para ayudar a cubrir los tremendos pero necesarios costos relacionados con exploraciones previas y distintas actividades de perforación.
Una vez se avance en estos aspectos, es decir, cuando la perforación se haya realizado y todo sea correcto, será el turno de los inversores para apostar por esta energía. Ellos serán los que lideren proyectos geotérmicos en Etioía, los que levantarán plantas de energía en todo el país y harán posible este desarrollo sostenible junto con la providencial inversión del Banco Mundial.