Marruecos quiere darle un buen empujón a la energía solar. Por lo pronto, entre otros proyectos, acaba adjudicar una primera planta termosolar a Acciona y a la saudí Acwa Power, dentro de su ambicioso plan de inversiones en energías limpias.
Con su aplicación, el país norteafricano aspira a convertirse en todo un referente del sector de la energía solar en la región. No en vano, a medio plazo espera poder movilizar inversiones por 12.350 millones de euros, lo que supondrá la creación de alrededor de 50.000 empleos.
El comunicado difundido por la sociedad Invest in Morocco da a conocer estas prometedoras cifras y explica que el nuevo plan solar nacional ha sido promovido por la Agencia Marroquí para la Energía Solar con la intención de cumplir el interesante objetivo de llegar a tener una instalación de 2.000 megavatios (MW) en el 2020.
En concreto, yendo a lo tangible, la citada planta asignada a Acciona tendrá una potencia de 160 MW y costará alrededor de 775 millones de euros que invertirán distintas entidades, entre ellas la Agencia Francesa de Desarrollo, el Banco Africano de Desarrollo, el Banco Europeo de Inversión, el Banco Mundial o la Unión Europea.
El proyecto pionero de esta fuerte apuesta por la energía solar de Marruecos corresponde al complejo de Ouarzazate y su inversión es de unos 6.900 millones de euros, un presupuesto que permitirá levantar un total de 5 plantas termosolares.
Además de la instalación de 2.000 MW, el Plan Solar Marroquí busca que las energías verdes aumenten su peso y, a su vez, disminuyan el de otras fuentes de energía. En cifras, se pretende aumentar el porcentaje de la energía proveniente de la solar hasta suponer el 14 por ciento. Lograrlo permitirá el ahorro equivalente a un millón de toneladas de petróleo y tambien evitará la emisión de 3,7 millones de toneladas de CO2 anuales.