El turismo es una de las actividades que tiene mayor impacto en el entorno natural. Muchas veces, se tiende a pensar que solo influyen los aviones o los desplazamientos por carretera, pero no es así. También los cruceros tienen sus repercusiones en el agua y en las especies que habitan en ella. Una situación a la que Noruega quiere poner solución, apostando por utilizar en los cruceros materiales más sostenibles como el biogás.
La medida
La idea parte de la compañía noruega de cruceros Hurtigruten. Los barcos de esta empresa funcionarán con biogás que procederán de restos de peces de la restauración y de la industria pesquera. Este biogás licuado se combinará con el gas convencional licuado y en baterías.
De esta manera, el proyecto ahonda en el concepto de sostenibilidad, ya que se ponen en valor los desechos orgánicos relacionados con los peces que se producen a raíz de la intensa actividad que se lleva a cabo en el Norte de Europa y en Noruega en los sectores de la pesca y en la silvicultura.
El objetivo de la empresa es que con este biogás puedan funcionar seis barcos antes del año 2021. De momento, para el año 2019, ya estará listo el primero de los cruceros para recorrer los fiordos de Noruega.
Estos barcos, cuando los seis estén en funcionamiento, se emplearán para recorrer la Antártida, Groenlandia o el Caribe, entre otros destinos, aparte de las rutas de la empresa por Noruega. Y es que la previsión es que los barcos naveguen hasta 14 días sin necesidad de repostar en el mar.
La compañía apuesta por ser así más sostenible con esta nueva medida, que se suma a otras iniciativas puestas en marcha como la eliminación del plástico de un solo uso en sus cruceros. Además, también ha incorporado tres barcos híbridos diésel-eléctricos.
No es la única
No obstante, esta iniciativa no es la única, porque ya el pasado mes de junio otra empresa -la compañía naviera Furetank-, anunció que iba a emplear biogás líquido para abastecerse.
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