INVELOX es una turbina atípica, pero su rareza podría ser sólo algo pasajero si su uso se extiende, una idea nada descabellada si tenemos en cuenta que puede producir hasta un 660 por ciento más de potencia que las turbinas convencionales.
SheerWind es la empresa que la ha desarrollado, y el sistema se basa en una especie de embudos que dirigen el viento hacia una turbina que, gracias a este invento, aumenta su potencia de forma muy significativa, concretamente entre un 81 y un 660 por ciento.
Acoplar a la turbina en sí esta serie de embudos tiene la ventaja añadida de poder atrapar el viento que llegue desde cualquier dirección para, una vez capturado, acelerarlo mediante unas tuberías especiales que lo dirigen hasta ésta, si bien la turbina está instalada en tierra, por lo que tampoco se trata de un aerogenerador convencional.
Inspiradas en las CWAT
El mastodóntico artilugio imita en buena parte a las denominadas turbinas compactas de aceleración del viento, conocidas como las CWAT, cuya apariencia es una torre alta con un ventilador gigante. Sin embargo, mientras aquellas no son económicamente viables, la INVELOX sí parece serlo, según se afirma en un comunicado de prensa, porque todavía no se ha sometido a pruebas de agencias independientes.
Sea como fuere, si nos basamos en lo dicho en la eufórica nota de prensa emitida por la compañía, la turbina INVELOX sería una auténtica revolución, ya que ha pulverizado el Límite de Betz, aumentando su rentabilidad gracias a una reducción de los costos tanto en instalación como en el mantenimiento.
Recordemos que la Ley de Betz establece que el rotor de un aerogenerador no puede extraer toda la potencia disponible en el viento, pues éste se frena. Por lo tanto, teniendo en cuanta que en la práctica se aprovecha un 40 por ciento de la potencia eólica disponible y que la máxima potencia eólica aprovechada la define esta ley física, sin duda la turbina INVELOX sería un punto y aparte.