América Latina quiere impulsar la energía eólica. En todo el subcontinente, de gran diversidad económica, cultural, y también climatológica y natural, hay un factor que comparten prácticamente todos los países: hay viento suficiente para producir energía limpia y renovable. Además, algunas de sus economías crecen sin cesar y demandan más energía.
Se calcula que el total de la capacidad eólica instalada en Latinoamérica creció cerca de un 50% en 2010. Más de 2.000 MW están funcionando actualmente en las diversas regiones. El país donde más se está desarrollando esta energía es Brasil, un país con varias áreas con un inmenso potencial para producir energía eólica. Además, cuenta con una sólida infraestructura industrial y una adecuada red eléctrica, así como una creciente demanda energética.